lunes, 30 de diciembre de 2013

2014 COMO OBTENER BIENESTAR, DICHA, ABUNDANCIA, PAZ Y ARMONÍA

Puedes dejar de atraer lo que ya no quieres, puedes comenzar a atraer lo que quieres y puedes hacer cambios en tu realidad por otras que te sean más agradables. Lo único que necesitas es decidir lo que vas a incubar en tu interior y dejarlo allí para que germine en tu holograma.
 
Tanto si crees o no crees que eres un creador deliberado, estas en lo cierto. Puedes creer que no eres el que diseña tu realidad. Sin embargo, la verdad es que eres un creador. Si lo crees te conviertes en el activo gestor de tu vida. Si no lo crees, lo haces sin conciencia y sin tener dominio sobre tus creaciones. En ambos casos creamos, lo queramos o no, solo podemos elegir hacerlo deliberadamente o en forma inconsciente.

Cuando no tomamos conciencia del magnifico poder que poseemos para crear, los resultados son producto de nuestro subconsciente. Y ya sabemos, en el subconsciente se almacena una gran cantidad de información y creencias que muchas veces no concuerdan con nuestros anhelos de bienestar. Cuando no somos conscientes de esta capacidad, nos llevamos muchas sorpresas, agradables y desagradables, porque no estamos conduciendo las energías voluntariamente hacia donde nos gustaría que se canalizaran.

Esta capacidad no guarda relación con nuestros conocimientos intelectuales, tampoco con nuestras creencias religiosa o si estamos en el camino espiritual o no. Todos, sin distinción, creamos y creamos con o sin conciencia, con ignorancia o sin ella. Dependiendo de los conocimientos y las creencias, un creador deliberado puede crear tristeza, desolación, guerras y escasez. Dios no interviene en nuestras creaciones, tiene sus preferencias, pero respeta nuestras inclinaciones, sean las que sean. Todo lo que el ser humano ha creado lo ha hecho utilizando esta capacidad innata.

La idea entonces, no es que te conviertas en un creador, porque ya lo eres. La meta es que te conviertas en un creador deliberado y consciente que, además, seas capaz de crear bienestar, dicha, abundancia, paz y armonía. En definitiva, crear aquello que te hace bien.

El holograma personal de tu vida te muestra si estas creando lo que te hace bien. Si no es así, puedes utilizar tu capacidad creadora conscientemente para realizar los cambios. Mirar tus creaciones con serenidad, apertura y con el afán de analizarlas y mejorarlas para tu propio bien, es el inicio del camino a la libertad. Tu holograma, que es la proyección de tu interior en el exterior, depende absolutamente de ti y de nada ni nadie más.

Si en tu interior existe la sensación de escasez, veras reflejada esa realidad en tu holograma. Si cambias esa sensación en tu interior, observaras el cambio en el exterior. Todo lo que te sucede depende de lo que estas proyectando y muchas veces, demasiadas veces, lo olvidas por completo. El olvido es aun más intenso y profundo, cuando tu situación económica está muy deteriorada y entras a jugar el juego desde dentro del holograma, peleando y discutiendo con tus propias creaciones. Como tus creaciones no pueden cambiar desde las imágenes, debido a que se originan en tu interior, te sientes deprimido, impotente y clamas suplicando que alguien te saque de allí. Sin darte cuenta te conviertes en un Quijote que pelea con molinos que no existen.

Tu sufrimiento y tus desvelos llegan a su fin cuando te relajas y miras qué es lo que tienes dentro que ha creado todo eso y te dispones a hacer los cambios necesarios para ello.  Recién entonces comienza tu viaje hacia la creación deliberada y consciente.

Es verdad que en algunas ocasiones comenzar a ver tu interior puede ser muy complejo debido a la poca destreza que nos hemos permitido en este sentido. Pero tu holograma nunca te dará lugar a dudas, él te muestra exactamente lo que tienes en tu interior y es bastante útil y acertado trabajar desde esta perspectiva.
 
Toda circunstancia puede ser mejorada bajo este concepto. Puedes dejar de atraer lo que ya no quieres, puedes comenzar a atraer lo que quieres y puedes hacer cambios en tu realidad por otras que te sean más agradables. Lo único que necesitas es decidir lo que vas a incubar en tu interior y dejarlo allí para que germine en tu holograma. Esta semilla crecerá y dará sus frutos independientemente del tiempo y la distancia, porque su manifestación no depende de estos factores. Solo depende de la cantidad de energía que le regales diariamente y de la calidad del enfoque (certeza).

¿En este momento te encuentras buscando un trabajo?, cierra tus ojos y dibuja el trabajo de tus sueños y riega esa semilla con energía diariamente. ¿No te gusta el nivel de ingresos que tienes en la actualidad?, cierra tus ojos y siembra en ti la semilla de un ingreso más elevado que te deje satisfecho. ¿No sabes cómo levantar tu proyecto o tu negocio?, cierra los ojos, despliega puertas en tu imaginación que al abrirlas te muestran ideas brillantes. Sin importar donde te encuentres, siempre hay un paso que puedes dar, luego vendrán los demás y la suma de ellos te llevaran a donde quieras ir.

Lo peor que puedes hacer es desvalorizar, atacar, criticar y enjuiciar las imágenes que estás viendo en tu holograma. Tu holograma es el espejo que te va mostrando por dónde vas y tiene información muy valiosa para ti. Toma esa información con grandeza, como lo que eres y utilízala a tu favor. Sin ésta información estarías perdido, no sabrías como avanzar, no sabrías qué modificar, no tendrías como evaluar tus avances, no podrías llevar estadísticas de tus logros, no tendrías la posibilidad de perfeccionarte hasta llegar a ser el más grande y maravilloso creador deliberado, tal como Dios te creó.

Patricia González. Coach internacional,  http://abundanciayovivo.blogspot.com

sábado, 21 de diciembre de 2013

ENAMORARNOS ES UNA LOCURA

EL AMOR ES SIMPLEMENTE UNA LOCURA PDF Imprimir E-mail
Escrito por RICHARD WEBSTER   
Tomado del libro Almas Gemelas

Nadie debería aceptar “el segundo lugar en la vida”. Esto también se refiere a las relaciones personales. Gran parte de su vida se perderá si se rinde y se casa con alguien que sabe que no es su alma gemela. Si lo hace, no experimentará el increíble amor y la pasión de dos personas que han estado juntas en existencias pasadas.

Podría parecer que no encontrará a esta persona especial. Tal vez haya experiencias que debe atravesar primero. Es posible que deba vivir inicialmente una relación difícil. Quizá necesite aprender a ser paciente.

Permanezca confiado de que su alma gemela está esperándolo y también está en su búsqueda. Cuando finalmente se encuentren, el periodo de espera habrá valido la pena. Recuerde que incluso –y tal vez especialmente- en una unión de almas gemelas, usted debe cuidar y alimentar la relación. Han tenido innumerables vidas juntos, y aprendido muchas cosas, ambos tienen el potencial para hacer enormes progresos en esta encarnación. No desperdicie la oportunidad dejando escapar su alma gemela.

¿Sabía que los científicos han descubierto que enamorarse involucra un grado de enfermedad mental? Un equipo de científicos italianos, balo la dirección de la doctora Donatella Marazziti, una psiquiatra de la Universidad de Pisa, cree que este es el caso. Ellos han encontrado que quienes sufren de trastornos obsesivo-compulsivos tienen cerca de un 40% menos de serotonina en sus organismos que las personas normales. Los enamorados comparten la misma característica.

Durante el experimento tomaron muestras de sangre de diecisiete hombres y tres mujeres en este estado, y las compararon con muestras de 20 individuos que sufrían de trastorno compulsivo, y 20 que no estaban enamorados ni tenían problemas psiquiátricos. Los voluntarios enamorados, o los que padecían del trastorno, tenían un 40% menos serotonina que el resto.

Es interesante observar que los enamorados fueron examinados un año más tarde, cuando se había disipado la intensidad inicial del estado y sus niveles de serotonina se habían normalizado. La doctora Marazziti afirma: “A menudo se dice que cuando estamos enamorados, enloquecemos, eso puede ser cierto”.

William Shakespeare lo sabía hace cuatrocientos años. En el acto 3, escena 2 de As You Like It, Rosalinda dice: “el amor es simplemente una locura”. Por supuesto, Rosalinda estaba locamente enamorada de Orlando. Encuentre su alma gemela y permanecerá “algo loco” y profundamente enamorado por siempre.

 

sábado, 31 de agosto de 2013

ME QUITO EL SOMBRERO - INTERVENCION EVO MORALES EN REUNION DE JEFES DE ESTADO DE LA COMUNIDAD EUROPEA (06/30/2013).

Exposición del Presidente Evo Morales ante la reunión de Jefes de Estado de la Comunidad Europea (06/30/2013).Con lenguaje simple, que era trasmitido en traducción simultánea a más de un centenar de Jefes de Estado y dignatarios de la Comunidad Europea, el Presidente Evo Morales logró inquietar a su audiencia cuando dijo:
 ·         Aquí pues yo, Evo Morales, he venido a encontrar a los que celebran el encuentro.
Aquí pues yo, descendiente de los que poblaron la América hace cuarenta mil años, he venido a encontrar a los que la encontraron hace solo quinientos años.
Aquí pues, nos encontramos todos. Sabemos lo que somos, y es bastante.

Nunca tendremos otra cosa.

El hermano aduanero europeo me pide papel escrito con visa para poder descubrir a los que me descubrieron.
El hermano usurero europeo me pide pago de una deuda contraída por Judas, a quien nunca autoricé a venderme.
El hermano leguleyo europeo me explica que toda deuda se paga con intereses aunque sea vendiendo seres humanos y países enteros sin pedirles consentimiento.

Yo los voy descubriendo. También yo puedo reclamar pagos y también puedo reclamar intereses. Consta en el Archivo de Indias, papel sobre papel, recibo sobre recibo y firma sobre firma, que solamente entre el año 1503 y 1660 llegaron a San Lucas de Barrameda 185 mil kilos de oro y 16 millones de kilos de plata provenientes de América.

 ¿Saqueo? ¡No lo creyera yo! Porque sería pensar que los hermanos cristianos faltaron a su Séptimo Mandamiento.
¿Expoliación? ¡Guárdeme Tanatzin de figurarme que los europeos, como Caín, matan y niegan la sangre de su hermano!
¿Genocidio? Eso sería dar crédito a los calumniadores, como Bartolomé de las Casas, que califican al encuentro como de destrucción de las Indias, o a ultrosos como Arturo Uslar Pietri, que afirma que el arranque del capitalismo y la actual civilización europea se deben a la inundación de metales preciosos!

 ¡No! Esos 185 mil kilos de oro y 16 millones de kilos de plata deben ser considerados como el primero de muchos otros préstamos amigables de América, destinados al desarrollo de Europa. Lo contrario sería presumir la existencia de crímenes de guerra, lo que daría derecho no sólo a exigir la devolución inmediata, sino la indemnización por daños y perjuicios.
Yo, Evo Morales, prefiero pensar en la menos ofensiva de estas hipótesis.

Tan fabulosa exportación de capitales no fueron más que el inicio de un plan 'MARSHALLTESUMA", para garantizar la reconstrucción de la bárbara Europa, arruinada por sus deplorables guerras contra los cultos musulmanes, creadores del álgebra, la poligamia, el baño cotidiano y otros logros superiores de la civilización.

Por eso, al celebrar el Quinto Centenario del Empréstito, podremos preguntarnos: ¿Han hecho los hermanos europeos un uso racional, responsable o por lo menos productivo de los fondos tan generosamente adelantados por el Fondo Indoamericano Internacional?

Deploramos decir que no.

En lo estratégico, lo dilapidaron en las batallas de Lepanto, en armadas invencibles, en terceros reichs y otras formas de exterminio mutuo, sin otro destino que terminar ocupados por las tropas gringas de la OTAN, como en Panamá, pero sin canal.
En lo financiero, han sido incapaces, después de una moratoria de 500 años, tanto de cancelar el capital y sus intereses, cuanto de independizarse de las rentas líquidas, las materias primas y la energía barata que les exporta y provee todo el Tercer Mundo.
Este deplorable cuadro corrobora la afirmación de Milton Friedman según la cual una economía subsidiada jamás puede funcionar y nos obliga a reclamarles, para su propio bien, el pago del capital y los intereses que, tan generosamente hemos demorado todos estos siglos en cobrar.

Al decir esto, aclaramos que no nos rebajaremos a cobrarle a nuestro hermanos europeos las viles y sanguinarias tasas del 20 y hasta el 30 por ciento de interés, que los hermanos europeos le cobran a los pueblos del Tercer Mundo. Nos limitaremos a exigir la devolución de los metales preciosos adelantados, más el módico interés fijo del 10 por ciento, acumulado solo durante los últimos 300 años, con 200 años de gracia.

 Sobre esta base, y aplicando la fórmula europea del interés compuesto, informamos a los descubridores que nos deben, como primer pago de su deuda, una masa de 185 mil kilos de oro y 16 millones de plata, ambas cifras elevadas a la potencia de 300.
Es decir, un número para cuya expresión total, serían necesarias más de 300 cifras, y que supera ampliamente el peso total del planeta Tierra.

 Muy pesadas son esas moles de oro y plata. ¿Cuánto pesarían, calculadas en sangre?
Aducir que Europa, en medio milenio, no ha podido generar riquezas suficientes para cancelar ese módico interés, sería tanto como admitir su absoluto fracaso financiero y/o la demencial irracionalidad de los supuestos del capitalismo.

Tales cuestiones metafísicas, desde luego, no nos inquietan a los indoamericanos.
Pero sí exigimos la firma de una Carta de Intención que discipline a los pueblos deudores del Viejo Continente, y que los obligue a cumplir su compromiso mediante una pronta privatización o reconversión de Europa, que les permita entregárnosla entera, como primer pago de la deuda histórica...'

Cuando el Presidente Evo Morales dio su conferencia ante la reunión de JEFES DE ESTADO DE LA COMUNIDAD EUROPEA, no sabía que estaba exponiendo una tesis de Derecho Internacional para determinar LA VERDADERA DEUDA EXTERNA, ahora solo resta que algún gobierno latinoamericano tenga el valor suficiente para hacer el reclamo ante los Tribunales Internacionales

jueves, 20 de junio de 2013

EL VERDADERO DAÑO QUE CAUSA EL CHISME

Escrito por RHONDA BYRNE   
Tomado del libro El Poder
"Dando el primer paso con un buen pensamiento, el segundo con una buena palabra y el tercero con una buena acción, entré en el Paraíso"
Libro de Arda Viraf (CIRCA SIGLO 6). TEXTO RELIGIOSO ZOROASTRISTA
La ley de atracción es un asunto pegajoso. Cuando te regocijas por la buena fortuna de otra persona, ¡su buena fortuna se te pega! Cuando admiras o aprecias algo en otra persona, estás haciendo que se te peguen esas cualidades. Pero cuando piensas o discutes cosas negativas sobre otra persona, estás haciendo que esas cosas negativas se te peguen también y las estás añadiendo a tu propia vida.

La ley de atracción está respondiendo a tus sentimientos. Cualquier cosa que das, la recibes, y así si tú le pegas una etiqueta a cualquier persona, circunstancia o hecho en la vida,., te estás pegando esa misma etiqueta a ti mismo y eso es lo que recibirás.

Ésta es una noticia fenomenal, porque significa que puedes pegarte todo lo que amas mediante la búsqueda de las cosas que amas en otras personas, ¡y diciéndoles que sí con todo tu corazón! El mundo es tu catálogo, y cuando entiendes el poder de tu amor, observar todo lo que amas en otras personas se convierte en un trabajo a tiempo completo. Pero es la manera más fácil y mejor de cambiar tu vida entera. Acaba con la adversidad y el sufrimiento. Lo único que tienes que hacer es observar las cosas que amas en otras personas y alejarte de las que no amas para no otorgarles ningún sentimiento. Es así de fácil.

CHISMEAR TAMBIEN ES PEGAJOSO. Chismear parece inofensivo en la superficie, pero puede causar muchas cosas negativas en las vidas de las personas. Chismear no es dar amor. Chismear es proyectar negatividad y eso exactamente es lo que recibirás de vuelta. Chismear no le hace daño a la persona de la que se habla; ¡chismear daña a los que están chismeando!
Cuando estás conversando con algún familiar o amigo y te hablan de una cosa negativa que alguien dijo o hizo, están chismeando y están dando negatividad. Cuando los escuchas, tú también estás dando negatividad porque eres un ser que siente y no puedes oír cosas negativas sin que tus sentimientos rápidamente tengan una recaída. Cuando conversas con un compañero de trabajo en el almuerzo y ambos hablan negativamente de alguien, están chismeando y dando negatividad. ¡No puedes hablar de la negatividad o escuchar cosas negativas y tener buenos sentimientos!

Así que, con toda franqueza, tenemos que tener cuidado de no meter la nariz en los asuntos de otras personas, ¡porque esos asuntos te van a tupir la nariz! A menos que eso sea lo que quieres en la vida, aléjate de eso sin sentir nada. No sólo te estarás haciendo un favor, pero le estarás haciendo un favor también a esas otras personas que no se dan cuenta de los efectos negativos que chismear puede tener en sus vidas. Si te hallas en una situación en que estás chismeando o escuchando chismes, detente en medio de una frase y di: "Pero me siento tan agradecido que..." Y termina la oración con algo bueno acerca de la persona sobre la cual están chismeando.

TU REACCION LO ESCOGE. La vida te presenta a cada persona y circunstancia para que puedas escoger entre lo que amas y lo que no amas. Cuando reaccionas ante algo, lo haces con tus sentimientos y, al hacerlo, ¡lo estás escogiendo! Tu reacción, buena o mala, se te pega, ¡y lo que estás haciendo es pedir más! De modo que es importante tener cuidado cómo reaccionas en tus relaciones, porque sea que reacciones con buenos o malos sentimientos, esos son los sentimientos que estás dando y recibirás más de las mismas circunstancias que te hacen sentir de esa manera.
Si una persona dice o hace algo, y te sientes disgustado, ofendido o furioso, procura hacer tu mejor esfuerzo por cambiar esa reacción negativa enseguida. El sólo hecho de estar consciente de que has reaccionado negativamente le quita inmediatamente el poder a los sentimientos negativos y puede incluso detenerlos.

Pero si sientes que los sentimientos negativos se han apoderado de ti, es mejor que te retires y tomes un par de minutos para buscar las cosas que amas, una tras otra, hasta que te sientas mucho mejor. Puedes usar cualquier cosa que amas para hacerte sentir mejor, como escuchar tu música favorita, imaginar las cosas que amas o hacer algo que te guste. Puedes también pensar en las cosas que amas en la persona que te causó el disgusto. Esto puede ser un reto, pero si puedes lograrlo, es la manera más rápida de sentirte mejor. ¡Es también la forma más rápida de convertirte en amo y señor de tus sentimientos!

Puedes cambiar cualquier situación negativa en tu vida, pero no puedes cambiarla con malos sentimientos. Tienes que reaccionar de manera diferente a la situación porque si continúas reaccionando negativamente, tus malos sentimientos se magnificarán y multiplicarán la negatividad. Cuando das buenos sentimientos, el positivismo se magnifica y se multiplica. Aunque no puedes imaginar cómo una situación particular puede convertirse en algo positivo, ¡sí puede! La fuerza del amor siempre encuentra la manera de hacerlo.

lunes, 17 de junio de 2013

SANGRE - PRECIOSO LIQUIDO

Escrito por ALEJANDRO SEGEBRE   
¿Sabías que en una gota de sangre existen 5.000.000 millones de células vivientes que tienen la capacidad de proporcionar vida a nuestro cuerpo?

Esas células vivientes llamadas glóbulos rojos tienen el precioso trabajo de transportar oxigeno, agua, nutrientes, hormonas a nuestras células, y  a demás de eliminar desechos metabólicos y toxinas alimenticias.  Pero esa sangre que circula por nuestras arterias puede ser contaminada a través de lo que comemos, tomamos, o respiramos y sin darnos cuenta podemos traer a nuestro cuerpo enfermedad y muerte.
Si nosotros tenemos una mala función de nuestro sistema digestivo, nuestra salud en general se verá afectada y el sistema inmunológico estará muy deprimido. Un buen sistema digestivo es la clave para estar sano y vivir largo tiempo. Los órganos, células y tejidos necesitan nutrientes para poder vivir y regenerarse, pero la única fuente de ello es a través de lo que comemos, digerimos y absorbemos, pero con una digestión deficiente nuestra energía y salud,  serán muy pobres.
Los glóbulos rojos son los encargados de transportar el oxigeno en nuestra sangre, por medio de un mensajero llamado HEMOGLOBINA que depende mucho de la cantidad y calidad de Hierro que este posea. Para que los glóbulos rojos transporten el oxigeno adecuadamente nuestra sangre tiene que estar alcalina, ya que es el PH apropiado para que el oxigeno sea liberado a nuestras células. Si la sangre se encuentra acida el oxigeno automáticamente se evapora, se seca y no puede ser liberado a los tejidos, ya que un PH acido en la sangre no es compatible con la salud y la vida y lo único que hace es generar enfermedad.

La falta de enzimas digestivas es la única manera de hacer que nuestra sangre se vuelva acida, ya que ellas son las encargadas de romper las partículas grandes de alimentos en partículas pequeñas y hacer posible que los nutrientes se puedan absorber. Si los alimentos que comemos no contienen enzimas digestivas las moléculas de la comida no se rompen adecuadamente y llegan a la sangre sin ser digeridas causando daño a los glóbulos rojos y blancos   y a demás convirtiendo esta comida en alimento para bacterias y parásitos. Cansancio, fatiga, pereza, falta de energía, stress, dolores musculares, dolores de cabeza, gases, distención abdominal, digestión pobre, llenura, intolerancia al azúcar, gripas frecuentes, alergias, anemia, mareo,  por lo general son señales de una pobre digestión y mala absorción de nutrientes hacia la sangre.

Los alimentos que contienen enzimas digestivas vivas son los alimentos crudos, como frutas y vegetales que no han sido sometidos a  altas temperaturas, ni a ninguna especie de cocimiento ya que las enzimas son muy sensibles al calor. Cada fruta, vegetal, cereal, o grano germinado, en su estado natural está cargado de enzimas. Desafortunadamente mueren al ser cocinadas, pues las enzimas mueren o son destruidas a temperaturas mayores de 50 grados centígrados. Cuando consumimos proteína animal como carne, pollo, cerdo, huevo, leche, queso, este tipo de proteína no puede ser digerida y pasa directamente a la sangre, haciendo que los glóbulos rojos se aglutinen y se peguen unos con otros impidiendo el transporte de oxigeno, la eliminación de las toxinas, y convirtiendo el PH de la sangre, en un PH acido.

Los parásitos son seres vivos igual que nosotros, por lo tanto comen y defecan en nuestra propia sangre haciéndola mas toxica y acida,  ya que la materia fecal de los parásitos se llama hongo y tienen 42 toxinas diferentes incluyendo la cándida, levadura y moho. Al extraer una gota de sangre y analizarla bajo el microscopio electrónico de Darkfield, se puede observar la presencia de hongos, parásitos, bacterias, toxinas, placa de colesterol, cristales de acido úrico, PH acido, glóbulos rojos aglutinados, deficiencia de vitaminas B12, acido fólico y hierro, glóbulos rojos deformes (muy grandes o muy pequeños) y  grasas sin digerir. 
 

MENTALIDAD ECOLOGICA

Tomado del libro Inteligencia Ecológica
Nuestro mundo de abundancia material tiene un precio oculto. No podemos saber en qué medida las cosas que compramos y usamos conllevan otros costos, el daño que le causan al planeta, sus efectos sobre la salud de los consumidores y sobre las personas cuyo trabajo hace posible nuestra comodidad y satisfacción de nuestras necesidades. Vamos por la vida inmersos en un mar de cosas que compramos, usamos y tiramos, desperdiciamos o guardamos. Cada una de esas cosas tiene su propia historia y su propio futuro, la parte de la historia anterior a nosotros y el final de la misma después de nosotros en gran parte oculta a nuestra vista, una inmensa red de impactos abandonados a lo largo del camino desde la extracción inicial o la mezcla de sus ingredientes, durante la fabricación y el transporte, a través de las sutiles consecuencias de su empleo en nuestros hogares y lugares de trabajo hasta el momento en que nos deshacemos de ellas. Y, a pesar de ello, es muy posible que estos impactos ocultos constituyan el aspecto más importante de tales objetos.

Nuestras tecnologías de fabricación y los procesos químicos que intervienen en las mismas fueron en su mayor parte elegidos en tiempos más inocentes, en una época en que tanto los compradores como los ingenieros industriales podían darse el lujo de ignorar o prestar muy poca atención a los efectos adversos de lo que se fabricaba. Por el contrario, todos se sentían comprensiblemente complacidos de los beneficios: electricidad generada a través de la combustión del carbón, en cantidades suficientes para durar siglos y siglos; plásticos baratos y maleables de un mar de petróleo en apariencia interminable; un verdadero tesoro de compuestos químicos sintéticos, polvo de plomo casi regalado para dar mayor brillo y vivacidad a las pinturas. Nuestros antecesores no tenían ni la menor idea del costo que todos estos productos bien intencionados tendría para nuestro planeta y sus habitantes.

Si bien es cierto que la composición y los efectos de los objetos que compramos y utilizamos todos los días son, en su mayor parte, el resultado de decisiones tomadas hace largo tiempo, siguen determinando hoy en día las prácticas que se emplean en el diseño de los productos que se fabrican y en la química industrial, y acaban en nuestros hogares, escuelas, hospitales y lugares de trabajo. El legado material que hemos recibido de las invenciones que alguna vez suscitaron el asombro de la era industrial que tuvo lugar a lo largo de todo el siglo XX, ha hecho que nuestras vidas sean muchísimos más cómodas y placenteras que las vidas de nuestros abuelos. Ingeniosas combinaciones de moléculas, nunca antes vistas en la naturaleza, producen una serie sin fin de milagros cotidianos. En el ambiente de negocios del pasado, los productos y procesos químicos industriales que seguimos utilizando hoy en día resultaban lógicos y tenían sentido, pero muchos de ellos han dejado de tenerlo. Los consumidores y las empresas no pueden seguir dándose el lujo de no examinar a fondo las decisiones relativas a dichos productos y procesos, así como sus consecuencias ecológicas.

La ecología industrial surgió de la idea de que los sistemas industriales se asemejan en muchos aspectos a los sistemas naturales: el flujo de productos manufacturados que pasó de una empresa a otra, extraídos de la tierra y emitidos en nuevas combinaciones, puede medirse en términos de insumos y productos regulados por una especie de metabolismo. En este sentido, la industria también puede considerarse como una especie de ecosistema, que tiene un efecto profundo en todos los demás sistemas ecológicos. El campo de la ecología industrial incluye aspectos tan diversos como el cálculo de las emisiones de CO2 de todos los procesos industriales o el análisis del flujo global de fósforo, hasta la manera en que el sistema de etiquetas electrónicas puede optimizar el reciclaje de la basura y las consecuencias ecológicas del auge de los baños de lujo en Dinamarca.

Considero a los ecologistas industriales, junto con los especialistas en campos de reciente creación como la salud ambiental, como la vanguardia de una naciente toma de conciencia, un factor que bien puede aportar una importante pieza faltante a nuestros esfuerzos colectivos por proteger nuestro planeta y sus habitantes. Tratemos de imaginar por un momento lo que sucedería si el conocimiento que hoy en día es propiedad exclusiva de especialistas como los ecologistas industriales, estuviera a disposición de todo el mundo: si se les enseñara a los niños en la escuela, si pudiéramos tener fácil acceso al mismo a través de Internet, reducido a evaluaciones fáciles de entender de las cosas que compramos y hacemos, si pudiéramos tener un resumen cuando estamos a punto de comprar algo.

Seamos un consumidor individual, el encargado de compras de una organización o el ejecutivo responsable de una marca, el hecho de conocer los efectos ocultos de los que compramos, vendemos o fabricamos con la precisión propia de un ecologista industrial nos permitiría participar en la creación de un futuro más positivo, puesto que nuestras decisiones coincidirían más con nuestros valores. Ya están en fase de investigación todos los métodos necesarios para darnos a conocer esa información. A medida que este conocimiento vital llegue a nuestras manos, entraremos en una era de lo que llamo transparencia radical.

La transparencia radical convierte los eslabones que unen cada producto y sus múltiples efectos, huellas de carbono, productos químicos preocupantes, trato de los obreros, etcétera, en fuerzas sistemáticas que ejercen influencia sobre las ventas. La transparencia radical fortalecerá toda una generación futura de aplicaciones tecnológicas, en la que programas de computadora serán capaces de manipular cantidades impresionantes de datos y presentarlas en forma concisa para facilitar las decisiones. Una vez que conozcamos los verdaderos efectos de nuestras decisiones de compra, podremos utilizar dicha información para acelerar el ritmo de los cambios y usarlos para bien.

No cabe duda de que ya existen diversas etiquetas ecológicas basadas en información de excelente calidad que evalúa algunos grupos de productos, pero la siguiente de la transparencia ecológica será mucho más radical, más amplia y detallada, y cobrará la forma de una avalancha. A fin de que esa enorme cantidad de información pueda ser utilizada, la transparencia radical debe sacar a relucir lo que se nos ha venido ocultando de manera mucho más amplia y mejor organizada que las evaluaciones de productos algunas veces sin orden ni concierto que tenemos ahora. Si tienen acceso a información correcta y precisa, los consumidores podrán efectuar cambios que afectarán al mundo del comercio en su totalidad, desde la fábrica más lejana hasta la estructura de poder del vecindario, y surgirá un nuevo frente en el campo de batalla de la participación de mercado.

La transparencia radical introducirá una claridad en cuanto a las consecuencias de las cosas que hacemos, vendemos, compramos y descartamos que vaya más allá de lo que muchos negocios hoy en día consideran aceptable y cómodo. Le dará una nueva forma al ámbito mercadotécnico que hará posible la mejor recepción de la enorme variedad de tecnologías y productos más limpios y ecológicos que están ahora en fase de investigación y creará un incentivo mucho más grande para que todo el mundo se decida a comprarlos.

Una transparencia ecológica semejante implica seguir un sendero económico que hasta ahora no hemos tomado: la aplicación de las estrictas normas de transparencia que se exigen, por ejemplo, de los mercados financieros, a los efectos ecológicos de los objetos que compramos. Los compradores dispondrían de información para tomar sus decisiones en forma semejante a la que los analistas del mercado de valores aplican a la evaluación de las pérdidas y ganancias de las empresas. Les brindaría a los dirigentes de las empresas mayor claridad para cumplir mejor con los deseos de sus compañías de ser más responsables desde un punto de vista social, favorecer una actuación sustentable y anticipar los cambios que tendrán lugar en el mercado.

Escuchamos con frecuencia las cosas que podemos hacer para ayudar al planeta, andar en bicicleta en vez de conducir el automóvil, usar los nuevos focos fluorescentes que ahorran energía, reciclar nuestras botellas, etcétera. Todos estos cambios en nuestros hábitos son elogiables; si todos nos esforzáramos por hacerlo, obtendríamos grandes beneficios.

Pero podemos ir más lejos. En cuanto se refiere a la inmensa mayoría de los productos, se han ignorado los verdaderos efectos de lo que compramos. si conociéramos los miles de efectos ecológicos ocultos que se producen durante el ciclo de vida de un producto, desde la fabricación hasta el desecho de esas bicicletas, focos y botellas, así como del resto de los materiales que se encuentran en la habitación, abriríamos una compuerta de actos eficaces. Si conocemos mejor los efectos que tienen los objetos que utilizamos, y aprovechamos dicho conocimiento para orientar nuestras decisiones de compra, tendremos mayor poder para influir en el mundo del comercio y la industria.

Con ello se abrirían las puertas de una gran oportunidad para beneficiar al futuro. En el caso de los compradores, este mecanismo puede fortalecer nuestra voluntad colectiva de proteger al planeta y a sus habitantes de los daños involuntarios del comercio. En cuanto a los negocios, la mayor coincidencia de los valores de los consumidores con sus decisiones de compra hará que la lucha por conseguir una ventaja competitiva sea más encarnizada y se convierta en una oportunidad financiera más sólida y prometedora que nuestras actuales estrategias “verdes” de mercadotecnia. Es posible que no seamos capaces de superar la crisis actual sólo mediante nuestras decisiones de compra, pero la transparencia radical nos ofrece una manera más de realizar cambios esenciales.

Todos hemos sido bombardeados con mensajes sobre la grave amenaza que representan el calentamiento global y las sustancias tóxicas presentes en los objetos que utilizamos o consumimos todos los días, así como con exhortaciones de que debemos efectuar cambios antes de que sea demasiado tarde. Una de las versiones de esta letanía es muy conocida: temperaturas cada vez más cálidas, huracanes cada vez más destructores, sequías feroces y desertificación externa en algunos lugares junto con lluvias torrenciales en otros. Hay quien predice una grave escasez mundial de agua y alimentos en los próximos diez años, el ejemplo preferido son los destrozos causados por el huracán Katrina en Nueva Orleans, y la evacuación de un número creciente de ciudades en todo el mundo debido al colapso del medio ambiente.

Otro coro, que cobra vida fuerza día a día, nos dice que los productos químicos fabricados por el hombre que se hallan en los objetos de uso diario nos están envenenando poco a poco, a nosotros y a nuestros hijos. Estas voces nos advierten que los compuestos utilizados para suavizar o endurecer plásticos liberan carcinógenos en absolutamente todo, desde las bolsas para transfusiones intravenosas en los hospitales hasta los salvavidas; los suavizantes químicos contenidos en los lápices de labios constituyen un riesgo para la salud; nuestras terminales de computadora emiten una toxina en tanto que las impresoras que las acompañan dejan escapar una nube de otra toxina diferente. Pareciera que el mundo manufacturado está creando un caldo químico que contamina con lentitud el ecosistema que es nuestro organismo. Todas estas advertencias señalan a los mismos culpables, usted y yo. La actividad humana se ha convertido en la principal causante de esta crisis que afecta gravemente, ¿a quién? Pues a usted y a mí, por supuesto.

Todos participamos en actividades que, de manera inexorable, ponen en peligro el nicho ecológico que alberga a la vida humana. El impulso de la inercia de nuestras acciones pasadas continuará durante décadas o incluso siglos; los productos químicos tóxicos que se infiltran en el agua y el suelo, así como la acumulación de gases de invernadero seguirán cobrando una cuota durante años y años.

Un escenario catastrófico semejante puede producir sentimientos de desesperanza, incluso de desesperación. Después de todo, ¿cómo podemos dar marcha atrás al vasto tsunami de la actividad humana? Cuanto más pronto dejemos de alimentar la ola, menos drásticos serán los años. Si examinamos con atención nuestra participación en la contaminación del nicho que poseemos en este planeta, podemos encontrar instancias en las que cambios sencillos y graduales pueden ponerle un alto e incluso dar marcha atrás a nuestra contribución al cataclismo.

En nuestra calidad de compradores individuales, nos vemos obligados a elegir entre un conjunto arbitrario de opciones de productos, un conjunto determinado por las decisiones que tomaron los ingenieros industriales, los químicos e inventores de todo tipo en algún punto distante del tiempo y el espacio. Nuestra capacidad de elección es ilusoria, pues sólo existe en los términos dictados por esas manos invisibles.

Por otra parte, en la medida en que podamos basar nuestras decisiones en información completa y exacta, el poder se transfiere de los que venden a los que compran, ya sea que se trate de un ama de casa en el mercado, del encargado de compras de una empresa o institución o del gerente de una marca. Podemos convertirnos en los arquitectos de nuestro destino y dejar de ser víctimas pasivas. Por el simple hecho de ir a la tienda, podemos votar con nuestro dinero.

Al hacerlo, crearemos una ventaja competitiva nunca antes vista para las empresas que ofrezcan los tipos de productos que necesita nuestro futuro colectivo. La elección informada impondrá nuevas exigencias a los ingenieros, químicos e inventores actuales. Afirmo que esta fuerza de mercado generará una demanda para toda una serie de innovaciones, cada una de las cuales constituirá una oportunidad empresarial. De esta manera, la agudización de nuestra inteligencia ecológica propiciará cambios positivos en los procesos industriales utilizados para fabricar todos los artículos que compramos. El golpe sufrido por todo el mundo a causa del alza exorbitante de los precios del petróleo tiene un efecto sinérgico en la búsqueda de optimizaciones ecológicas porque modifica de modo radical las ecuaciones de los costos e incrementa la necesidad de encontrar alternativas ventajosas.

A medida que el control de la información pase de los vendedores a los compradores, las empresas harían bien en prepararse con anticipación para este cambio monumental. La regla básica de los negocios en el siglo pasado, lo barato es mejor, está empezando a ser complementado, y en ocasiones sustituida, por un nuevo mantra del éxito: lo sustentable es mejor, lo más saludable es mejor y lo más humano es mejor. Ahora podemos saber con mayor precisión cómo poner en práctica dicho mantra.

jueves, 6 de junio de 2013

TIPOS DE MENTE

Escrito por Walter Riso 

La función del hombre sabio consiste, sobre todo, en deliberar rectamente…Y delibera rectamente, en el sentido más estricto de la palabra, quien apunta en sus cálculos hacia las más altas actividades abiertas del hombre” Aristóteles

Las personas tienen formas distintas de relacionarse con la información disponible en sus cerebros. Existen mentes que parecen de piedra: inmóviles, monolíticas, duras, impenetrables y rígidas, donde la experiencia y el conocimiento se han solidificado de manera sustancial e irrevocable con el paso de los años. Hay mentes que podríamos llamar Liquidas, que no se interesan por nada y se acomodan a las demandas de la vida sin fijar posiciones de ningún tipo; mentes sin cuerpo propio, informes, incoloras, sin constancia ni sustancia e indolentes. Y también existen las mentes Flexibles, que funcionan como la arcilla; no son insustanciales como las mentes liquidas, pero tampoco están definidas de una vez para siempre como las mentes de piedra. Pueden avanzar, modificarse, reinventarse, crecer, actualizarse, revisarse, dudar y escudriñar en las mismas sin sufrir traumas.
1. LA MENTE RIGIDA
El mecanismo básico de las
personas rígidas es la resistencia a
cambiar cualquiera de sus 
comportamientos, creencias u 
opiniones, aunque la evidencia y los
 hechos les demuestren que están
 equivocadas.
La mente rígida vive en un limbo facilista, distorsionado y altamente peligroso.
Facilista, porque tapa el sol con el dedo y se atrinchera en la lógica: “Si siempre fue así, por algo es”.
Distorsionado, porque los procesos de toma de decisión están saturados de sesgos y errores cognitivos, de los cuales no suelen ser conscientes.
Y Peligroso, porque  cuando las personas rígidas son confrontadas con argumentos sólidos, se vuelven profundamente irascibles, autoritarias e impositivas.
 
Algunas desventajas de la mente rígida:
·        Niveles altos de estrés y depresión
·        Baja tolerancia a la frustración: hace pataletas
·        Malas relaciones interpersonales
·        Dificultad en la toma de decisiones
·        Déficit en la resolución de problemas
·        Miedo a cometer errores y al cambio
·        Angustia por no tener el control de las cosas
·   Alteraciones laborales, sexuales, afectivas y demás, porque toda persona rígida busca un perfeccionismo inalcanzable.
2. LA MENTE LIQUIDA
¿Quién no ha estado alguna vez con alguien que lo único que hace es no tomar partido de nada o adopta alternativamente posiciones contradictorias sin intentar resolverlas o siquiera comprenderlas?. Una mente indefinida y apática es una mente voluble y despersonalizada, que no es capaz de reconocerse a sí misma. Es líquida: se escapa, se derrama, toma la forma del recipiente que la contiene o permanece indefinida e inconsistente. Vaciada de toda idea, no fija posición ni se compromete.
La mente liquida pone todo el control afuera, se deja llevar por la marejada y, por eso, es mediocre y trivial. la motivación se convierte en algo tan instantáneo y volátil, que la sola idea de profundizar produce molestia, pero no por miedo a que las ideas tambaleen como haría el dogmático, sino por simple y llana pereza.

3. LA MENTE FLEXIBLE
No está fija en un punto ni se

desliza por cualquier parte sin 

rumbo, sino que posee una

dirección renovable. A la mente 

flexible le gusta el movimiento
,
 la curiosidad, la exploración, el

humor, la creatividad, la

irreverencia y, por sobre todo,

 ponerse a prueba. 
La mentalidad amplia o abierta utiliza el pensamiento crítico como guía de sus decisiones. Se opone al dogmatismo en tanto es capaz de dudar de lo que ya cree cuando hay por qué dudar, es decir, cuando la lógica (buenos argumentos) y la evidencia (el peso significativo de los hechos) la cuestión y, por lo tanto, la obligan a examinar en serio los propios esquemas.
¿Y la Fe? ¿Existe la Fe flexible? Para mí, existe la Buena Fe. En la Buena Fe, la razón no muere, se mezcla con el corazón, generando una decisión que implica el ser total.
Tres principios de la mente Flexible
1. La excepción a la regla: Buscar la excepción, la irregularidad de ciertas pautas establecidas, sugiere aterrizar las ideas, someterlas a contrastación y humanizarlas. Implica poner la certeza en remojo. La mente flexible confronta los principios, criterios o mandatos, tratando de definir las fronteras a partir de las cuales dejan de funcionar.
2. El camino del medio: Lo que intenta la mente flexible es establecer una carretera por donde transitar con moderación, sin asfixiarse ni darse contra las paredes. La búsqueda del camino del medio aparece en prácticamente todas las tradiciones filosóficas y espirituales con distintas denominaciones: “Camino del medio”(Buda), “Armonía” (Confucio), “Equilibrio dinámico”(Lao Tse) o “Prudencia” (Tomas de Aquino). ¡Pero incluso el camino del medio tiene excepciones!: ¿Cuál sería el punto medio de un violador? ¿Violar solo un poco? Hay “vicios” que no permiten sino la exclusión.
3. El Pluralismo: La mente flexible es responsiva y sensible a otros puntos de vista sin verse necesariamente en la obligación de aceptarlos. Incluye a los demás, viaja con ellos, intentando averiguar sus respectivos fundamentos y su parecer. Pero este viaje solo es posible si se hace con humildad, sin la vanidad del que se las sabe todas.


Algunas ventajas de la mente flexible:

·        Las relaciones interpersonales son amables y constructivas

·        Viven en paz consigo mismo

·        Las cosas fluyen sin tantos requisitos

·        Los niveles de estrés y depresión bajan

·        Crecen y desarrollan su potencial humano

·        La risa y el humor forman parte de su vida cotidiana

·        Los niveles de prevención y desconfianza bajan

·        Mejora el sueño y todas las actividades somáticas

·        Las personas se sienten más felices y se aproximan más a la sabiduría.

HIGADO GRASO

Enfermedad que se le conoce también con el nombre de esteatosis hepática palabra que proviene del griego esteato que significa grasa o sedo  y de la terminación osis que significa degeneración, es decir acumulación de depósitos de grasa en las células del hígado (Hepatocitos) que hacen que la función del hígado sea interrumpida.

Podemos afirmar entonces que la esteatosis hepática es una enfermedad crónica degenerativa del hígado causada por el consumo de grasas de origen animal saturadas como res, cerdo, pollo, lácteos y además de grasas que han sido alteradas por las altas temperaturas como las grasas fritas, hidrogenadas, Trans, margarinas y todo tipo de grasa que ha sido procesada y refinada, la cual ha perdido todo su valor nutricional y se ha convertido en un combustible.
Al ingerir todo estos tipos de grasas malignas hacen que la bilis en el hígado se vuelva muy espesa, viscosa y se empiece a coagular entorpeciendo su flujo hacia el intestino delgado creando los cálculos biliares que hacen que se forme un estancamiento de grasa y de bilis dentro del hígado, dando inicio a un hígado graso. 

El hígado es un órgano que controla la digestión, absorción y metabolismo de las grasas en todo el cuerpo, al tener hígado graso y cálculos biliares, interfiere con el metabolismo de las grasas afectando los niveles de colesterol en la sangre, y un desequilibrio de las grasas en la sangre afecta profundamente el sistema nervioso y puede causar cualquier tipo de enfermedades en el cuerpo.

Otros factores muy importantes que contribuyen y pueden llegar a formar muy fácilmente un hígado graso son el consumo frecuente de alcohol, ya que este se convierte en grasa en el hígado y los medicamentos farmacéuticos como antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios, ya que todos ellos son metabolizados en el hígado entorpeciendo con el proceso de desintoxicación volviendo lento y toxico este órgano.

Por lo tanto tener hígado graso es el mayor indicativo para saber automáticamente que su hígado está lleno de cálculos biliares, causando una enorme obstrucción hepática impidiendo su proceso de desintoxicación y causando muchos síntomas y enfermedades. 

Si usted presenta los siguientes síntomas o señales son indicativos de que lo más probable es que tenga hígado graso y cálculos biliares: colesterol alto, cuello rígido, dolor de espalda, ojeras oscuras debajo de los ojos, insomnio, pesadillas, irritabilidad, boca amarga, mareos, impotencia, manchas color café en las manos, hemorroides, adormecimiento de las piernas, dolor de cabeza, articulaciones rígidas y dolorosas, espasmos musculares, ojos amarillos, problemas de la visión y problemas digestivos como reflujo, distención abdominal, gases y mucha intolerancia a las grasas.

Depósitos de grasa en nuestros parpados que se reflejan como bolsas debajo de los ojos y color amarillo verdoso en nuestras partes blancas de los ojos (conjuntivas) son signos que indican degeneración de tipo graso. La manera más fácil y no invasiva de diagnosticar un hígado graso es con la Iridologia, al observar un anillo de colesterol en la periferia del iris y un color amarillo verdoso del ojo y su conjuntiva. Desafortunadamente para esta enfermedad la medicina moderna no tiene una cura y para poder revertirla simplemente hay que cambiar nuestros hábitos de vida,  de alimentación y proporcionarle al cuerpo los minerales y vitaminas que han estado en deficiencia por mucho tiempo, que los ha llevado a una desnutrición celular y a una autointoxicación de desechos metabólicos y toxinas de alimentos refinados.

Seguir una dieta de origen vegetal equilibrada (frutas, vegetales, granos, germinados, cereales y tubérculos cocidos)  es una de las maneras más efectivas de prevenir la formación de hígado graso, cálculos biliares, enfermedad cardiovascular y cáncer. Todos los tipos de proteína animal disminuyen la solubilidad de la bilis haciéndola más espesa, creando así un alto factor de riesgo en la formación de cálculos biliares e hígado graso.

Una manera muy efectiva de empezar a ablandar y disolver los cálculos biliares es tomando 2 litros de jugo de manzana al día por 10 días, ya que esta fruta contiene dos ácidos muy poderosos que disuelvan cálculos y ellos son el ácido málico y el ácido tartárico. Una vez que los cálculos biliares están ablandados y pequeños se necesita dilatar los canalículos del hígado para poder expulsarlos hacia el intestino delgado y eso se logra con el mineral magnesio que contiene la clorofila del jugo verde.

El hígado graso es una enfermedad que se puede prevenir, pero si ya la tienes debe eliminar de su alimentación las proteínas animales, las grasas fritas, hidrogenadas, Trans, de panadería como la vitina, las margarinas, azucares refinadas como las gaseosas  y harinas refinadas donde la cascara ha sido eliminada, el alcohol y los medicamentos de farmacia. La cascara de los cereales y granos contiene una cantidad de minerales y grasas especializadas como la lecitina y la vitamina E que ayudan a mantener la bilis bien soluble como agua, pero la industrialización de los alimentos ha eliminado estas cascaras convirtiéndolos en alimentos refinados. Ejemplos: el trigo se convierte en pan blanco  y el maíz se convierte en hojuelas de maíz y arepa harina.

lunes, 3 de junio de 2013

APRENDER A DECIR ADIÓS



Vivir pendiente de asuntos que debieran estar concluidos, pero que no nos atrevemos a cerrar, tiene un consumo innecesario de energía y de presente, porque nos estanca y nos impide desarrollar correctamente el camino derecho de la vida.


En este mundo, y en esta vida, todo tiene un principio y todo tiene un fin.


Así hay que aceptarlo.


Las relaciones, y los sucesos, siempre tienen un ciclo y no se debe tratar de llevarlos más allá del que es su fin lógico.


Aunque nos gustaría que así no fuera, las cosas hay que dejarlas marchar, no interferir en su proceso, no aferrarnos a ellas, y saber darles libertad para que no nos aten ni se queden atadas a nosotros.


El proceso desde que se intuye la conveniencia de decir adiós hasta que se lleva a la práctica es muy desigual en el tiempo, en función de cada persona y en función de la fortaleza del vínculo que los ha mantenido relacionados.


No siempre nos damos cuenta de ello, pero estamos aferrados a nuestro pasado –porque eso nos confirma que hemos existido hasta ahora-, y dejar el pasado, por muy desagradable que éste sea, es como renunciar a una parte nuestra.


Por eso cuesta tanto a veces.


Para deshacernos de una situación, o separarnos de una persona, es muy conveniente que la relación entre ambos haya llegado hasta su finalización, hasta el punto en que ya no está aportando nada positivo –dado que es condición que todas las relaciones aporten algo- y que su única contribución sea negativa e innecesaria.


Si solamente es negativa, lo será aparentemente, porque nos sigue diciendo que hay algo que tenemos que resolver.


Si es innecesaria al mismo tiempo, porque ya hemos aprendido todo lo que teníamos que aprender de ella, conviene cancelarla a la mayor brevedad posible.


Una buena prueba para saber si estamos plenamente en el presente, o si seguimos enganchados a algo que tenemos a lo que tenemos que decir adiós, es observar si estamos más en el pasado que en el aquí y ahora.


En el pasado conviven tanto las cosas que nos parecen buenas como las que nos parecen malas, y hay que decir adiós a ambas.


No olvidarlas, sino conseguir que no nos afecten negativamente en el presente.

Las que llamamos “buenas” está bien que sigan, pero no que tratemos de resucitarlas continuamente e instalarlas en el presente donde ya no están. Sí es bueno mantenerlas latentes y cálidas, pero separadas de nosotros, para poder recrearlas o recordarlas cuando lo creamos conveniente, para dejarlas partir luego sin pretender retenerlas.


Así ha de ser.


Con cuidado de no querer hacer del presente una repetición de ese buen pasado que ya no está.


Y con más cuidado todavía de no entrar en una comparativa en la que nos defraude el presente porque nos parece que el pasado fue mejor.


El peligro de no hacerlo así es doble: si nos gusta más el pasado, no encontraremos motivaciones para seguir en el presente, y, si no encontramos motivaciones interesantes para seguir, se nos confirma la primera parte y concluimos afirmando que el pasado es mejor.


Insisto en que no hay que borrar las cosas buenas, ni negar su existencia.


Las cosas buenas que nos han pasado nos amplían la sonrisa, fortalecen la confianza en que la vida es bella, y nos hacen darnos cuenta y valorar nuestra capacidad de disfrutar, de ser felices, de amar…


Son un tesoro que tenemos que guardar, y son proveedores continuos de una sensación muy agradable que nos hace auto-valorarnos por lo que hemos sentido y disfrutado.


Las cosas que entendemos y sentimos como “malas” es conveniente que no dejen ni rastro. Nos quisieron enseñar algo y, si lo hemos aprendido, ya no las necesitamos.


Estancarnos en el dolor de las que cosas que hemos sentido, o las que hemos perdido, nos arrastra hacia el pasado y no nos dejan disfrutar el presente con la intensidad que requiere.


Hemos de ser generosos –con nosotros mismos-, y darnos permiso para deshacernos de tan pesada e inútil carga.


Pero para decir adiós, previamente hemos tenido que llevar la relación o el sentimiento hasta el final.


Casi siempre queda algún asunto inconcluso, y no se puede cerrar página definitivamente si no está liquidado del todo.


Mediante terapia, relajación inducida y dirigida por un profesional, o del modo que uno considere posible o apropiado, hay que ponerse frente al asunto, sacarlo todo a la luz, expresar los sentimientos que se acallaron, manifestar lo que no se dijo, y, quizás, hasta hacer lo que no se hizo.


Algunos psicólogos recomiendan escribir una carta en la que se exprese todo lo que esté pendiente, o llevan a la persona a un estado de relajación en la que pueden sentirse en la situación, o frente a la persona, y concluirla.


Es un duro proceso interno, pero muy liberador.


Si hay amor acallado, rencor, rabia, reproches, odios, conviene sacarlos y no dejarlos dentro de nosotros clavándonos sus puñales.


Es bueno que nos atrevamos a pronunciar hoy lo que aquellas veces no dijimos, y decirles la palabra amor y sus sinónimos a los que ya no están y se la merecieron, o echarles en cara cuánto nos hicieron sufrir, cuánto dolor nos produjeron, o hablarles –de viva voz- de la nostalgia que nos provocan.


Cada situación que ya ha sido conclusa en el tiempo, tiene que ser simbólicamente enterrada, y requiere su duelo, ya que ha muerto al presente.


Este duelo es ponerse en contacto con el vacío que ha dejado, valorar la  importancia de aquél o aquello que ya no está, y soportar el sufrimiento y la frustración que comporta.


Una vez dados estos tres pasos ya no hay que alargarlo más. No ha de eternizarse el dolor.


Podemos vivir, y mucho mejor, sin arrastrar un luto infinito, una pena inconsolable, un remordimiento callado pero hiriente, o un continuo reproche por lo que no se hizo cuando se debió hacer.


Y esta es una noble, valiente y necesaria tarea que hay que emprender.


Puede ser dura mientras se realiza, pero hay que hacerla, aunque, generalmente, cuando demuestra su gratificación es una vez terminada.


La vida sigue, y con más intensidad, cuando se ha dicho, de corazón, adiós[1].

 




[1] (Francisco de Sales, es el creador de la web www.buscandome.es, para personas interesadas en la Psicología, la Espiritualidad, la Vida Mejorable, el Autoconocimiento y el Desarrollo Personal)